El gol de Mariano González en el Tomás Adolfo Ducó pareció ser un resultado seguro para el Globo de Eduardo Dominguez, pero lo que jamás imaginó es que el Caracas lo sorprendería en Venezuela, a tal punto de dejarlo al borde de la eliminación.
El gol de Rubert Quijada al término del primer tiempo fue un llamado de atención para Huracán, no solo por el mal juego propuesto en una cancha que realmente no se podía jugar, sino porque el 0-1 lo mandaba directo a la definición por penales.
En el complemento, el equipo de Antonio Franco abusó de su confianza para intentar liquidar la serie. Mientras tanto, el conjunto de Parque Patricios no podía conectar a Daniel Montenegro y Patricio Toranzo, piezas claves de Huracán en la generación de juego. Para colmo, el equipo argentino n ganaba para disgustos,ya que Mariano González, jugador clave en la ida, fue expulsado por doble amarilla y minutos más tardes Caracas lograba el tan ansiado gol de la clasificacion, por intermedio de Paulo Arango luego de un gran remate de afuera del área.
Cuando el panorama hacía suponer el festejo venezolano y la derrota del Globo, Dominguez decidió poner al ex Estudiantes, Diego Mendoza, en busca de un milagro. En la agonía del partido, la frialdad de Toranzo para manejar el último ataque de la noche sirvió para que Ezequiel Miralles le colocara un centro perfecto a la cabeza de Mendoza para vencer al joven Wuilker Fariñez y desatar la locura de sus hinchas y por supuesto, la clasificación.
De esta forma, Huracán volvió a salirse con las suyas y se mete directo al grupo 4 de la Copa Bridgestone Libertadores, donde chocará con Atlético Nacional de Colombia, Peñarol de Uruguay y Sporting Cristal de Perú.
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