El que no arriesga no gana

En el partido más importante de este fecha 12 denominada "De los clásicos", Boca y River terminaron igualando, 0 a 0 en la Bombonera en un encuentro que solo sirvió para reflejar el objetivo de cada uno en este Superclásico: el temor a no perder.

Cara y cruz para las figuras. Gran partido de D"alessandro, no así el de Tevez

Es difícil llevar adelante un análisis de lo que dejó el choque entre los equipos más grandes del país. Quizás para el local, Boca, fue una sensación más positiva que negativa. Primero por haber aguantado los 90" con un hombre de menos ante el rival de toda la vida, viendo esto como un punto a favor. En cambio, las malas sensaciones de que nuevamente el plan de Guillermo Barros Schelotto se vio tirado por la borda, ya que Pablo Pérez, seguramente el jugador más complicado de mantener dentro de una cancha por su temperamento, volvió a dejar a sus compañeros en inferioridad númerica luego de lanzarle una sonsa patada en el estómago al colombiano Eder Alvarez Balanta y así Herrera lo mando a las duchas. De esta forma, el xeneize tuvo la obligación de quemar los papeles y pensar un plan más para ordenarse de atrás para adelante que mirar de cerca el arco defendido por Marcelo Barovero. No solamente ese fue el dolor de cabeza para su entrenador, sino que las malas noticias se hacían más presentes que nunca, debido a que Fernando Gago tuvo que ser reemplazado por Marcelo Meli tras caerse solo en su propia área para que luego se confirmara, por segunda vez en su carrera, la rotura del tendón de aquiles.

El choque de Balanta a Orion desencadenó la furia de un Pérez que vería la roja

Por el lado de River, las sensaciones finales son de bronca, teniendo en cuenta que la mayoría de los integrantes de su plantel, caso Gabriel Mercado y Andrés D"alessandro, coincidió en que el partido "estaba para ganarlo". Sin lugar a dudas que no es un pronóstico errado, quizás sí un tanto exagerado, ya que el Millonario jamás encontró la llave indicada para quebrar una defensa de Boca que sacó de arriba y de abajo, de izquierda y de derecha.

Lo más aproximado del conjunto de Gallardo nos lleva a recordar el primer tiempo, en donde el "Cabezón" hizo volar a Agustín Orion tras una gran ejecución de tiro libre, una característica del zurdo en cada pelota quieta. Más tarde, no hubo otra situación como para pensar en que debió vencer al dueño de casa.

El enganche jugó uno de sus mejores partidos desde su vuelta

Si habría que elegir quienes fueron los jugadores que estuvieron a la altura de semejante partido sin dudas que por el lado de River la gran actuación del ex Internacional de Porto Alegre, Andrés D"alessandro,se lleva todos los votos, por ser el jugador más inteligente que tuvo la tarde de la Bombonera y el más decisivo en el momento de intentar lastimar a su rival. Mientras que para Boca el joven Cristian Pavon, junto con el uruguayo Lodeiro, se ganaron los aplausos, uno por no parar un segundo de correr a los largo de los 90 minutos y el otro por raspar y empujar a su equipo cuando sabía que estaba en desventaja.

Fue empate entre xeneizes y millonarios en una nueva edición del Superclásico del fùtbol argentino. Igualdad que muestra el cuidado de ambos por no salir heridos, pero si las intenciones de cada uno de cara al futuro: la Copa Libertadores.